QUICHE LORRAINE

 

Una de  esas recetas  simples y sabrosas que nunca fallan en mi cocina… mmm, délicieux!!

Desde que aprendí a hacerla, no he parado de conocer diferentes versiones de la misma receta. Empecé echando un poco de todo: calabacín, bacon, champiñones y cebolla. Durante años he empleado la nata como ingrediente principal, y pese a estar buena, llegaba a resultar algo pesada, empalagosa.

Luego, leyendo en uno de los libros de cocina que me pedí para mi 30 cumpleaños, descubrí que la auténtica Quiche Lorraine lleva bacon y poco más. Y eso de utilizar nata, menudo sacrilegio!. El ingrediente principal es la Crème Fräiche, o como comúnmente se conoce: Crema agria.

El resultado poco tiene que ver con la receta que durante años he estado preparando. Es ligera, más crujiente, sabrosa y cremosa. Eso si, yo siempre opto por echar una pizca de cebolla y algún que otro ingrediente extra, como hoy, que he decidido coger  algunos espárragos de las tierras granadinas de Oscar y echárselo también a la mezcla.

El sabor es delicioso. Lo he acompañado con una ensalada de trampó con tomates y pimientos blancos que compré el fin de semana en el mercado.  La verdad es que es una receta que nunca falta en mi casa, sobretodo cuando tengo invitados (como hoy) y especialmente en esas largas noches de verano que se acercan (para mi lo único bueno que tiene el verano :-)), acompañado con una ensalada y una buena copa de vino.

Aquí os dejo la receta. Espero que os guste tanto como a mí.

QUICHE LORRAINE ( a mi estilo)

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Ingredientes:

– Masa  quebrada o brise fresca(se puede hacer casera. La he hecho dos veces, pero la verdad es que la comprada está muy rica)

– 2 huevos

– 1 bote de Crème Fräiche o Crema agria (la venden en grandes supermercados. Concretamente siempre la compro en Carrefour)

– 1 paquete de bacon ahumado

– Media cebolla

– Queso Emmemental

– Puedes incluir un ingrediente o dejarlo tal cual. Esta vez le he añadido unos trocitos de espárragos.

– Una pizca de pimienta y sal.

Preparación:

Antes que nada, ponemos la masa de hojaldre en un molde (yo utilizo uno redondo) que previamente habremos engrasado o bien utilizaremos papel vegetal. Pinchamos la masa con un tenedor para evitar que suba. Y lo introducimos en el horno a 160 grados, unos minutitos, los necesarios hasta que notes que la masa está comenzando a endurecer. No mucho

A continuación preparamos el relleno.

Cortamos el bacon y la cebolla en trocitos pequeños (también los ingredientes extra que quieras echar). Lo apartamos del fuego una vez se ha pochado. Reservar.

Por otro lado, en un bol, echamos dos huevos. Mezclamos e introducimos todo el bote de Crème Fräiche. A continuación vertemos el bacon, la cebolla y el ingrediente extra, en el caso de que lo tuviéramos, a la mezcla. Y volvemos a mover lo que será el relleno. Salpimentamos al gusto.

Cuando la masa que hemos metido en el horno esté un poquito dura,  la sacamos del horno y vertemos el relleno encima de la masa. Aderezamos con queso ememental rallado  y lo volvemos a introducir al horno. Unos 15-20 minutos más. Hasta que veas que la base de la masa está doradita y el queso ha empezado a gratinarse.

Bon appetit!