Hace tiempo que no subo una entrada de comida. El verano ha sido el culpable. Tanta calor ha podido conmigo, me ha quitado no sólo las ganas por cocinar, sino por comer también. Sin embargo, el olor a tierra mojada del sábado, hizo que me diera cuenta de que ya queda menos. Y bueno, si, me puso de buen humor e instantáneamente tuve ganas de meterme en la cocina y, aprovechando que este año tengo albahaca de sobra, decidí hacer esta receta que es muy especial para mi. Tiene una historia. Me la enseñó a cocinar Chantal, una mujer culta y de mundo, a la que tuve la suerte de ayudar durante unos veranos y en contadas ocasiones como pinche de cocina. Siempre preparábamos dos platos de pasta. Uno caliente (esta de pesto) y otro frío (con berenjena y mozarella fresca de escándalo). Recetas que había aprendido durante sus años viviendo en Roma. Fueron unos veranos inolvidables, sus invitados a cenar eran artistas, escritores y embajadores. Nunca olvidaré esa experiencia. Algún día os contaré…
Os dejo con una de las recetas. Amo la pasta cuando pienso en esta en particular.
PENNE RIGATE CON PESTO DE ALBAHACA, JUDIAS VERDES Y PATATA
Ingredientes:
– 1 paquete de Penne Rigate
– 3 patatas medianas
– 300 grs de judias verdes finas
– 1 diente de ajo
– 40 grs de hoja de albahaca
– 70 grs de queso parmesano
– 60 grs de piñones
– 200 ml de aceite de oliva
Preparación:
Cortamos las verduras. Las judias las lavamos y las partimos por la mitad. Las hervimos en un cazo con agua salada. Cuando veamos que están tiernas, las sacamos del fuego, colamos las judías y las metemos dentro de un bol con agua fría y hielo. Las escurrimos y las secamos con papel de cocina.
Por otro lado, cortamos las patatas en cubitos pequeños. Seguimos el mismo procedimiento que con las judías. Escurrimos y secamos del mismo modo con papel de cocina.
Mientras las verduras se están cociendo, podemos hacer el pesto de albahaca. Para ello ponemos en el triturador los ingredientes en este orden para que se mantenga bien verde y la albahaca no se oxide:
1. Piñones
2. Parmesano rallado
3. Diente de ajo
4. Hojas de albahaca
5. sal
6. Aceite de oliva
Trituramos y apartamos.
El último paso será la de hervir la pasta en abundante agua salada, podemos sacar un poco de agua de la cocción y diluir sobre la salsa pesto. Eso le dará más cremosidad.
Una vez la pasta esté al dente, la colamos.
Mezclamos la pasta con las judias, las patatas y el pesto de albahaca.
Este plato se come caliente- templado.
Servido con un vino de aguja bien fresquito es delicioso!!
Preciosas fotos!!