¡Hola!
creí que no volvería.
Los que me seguís por Instagram sabéis que a principios de Junio empecé trabajo nuevo y que coincidió a su vez con la «muerte» de nuestro ordenador. Después de darlo todo por perdido y pasar unas 2 semanas que se me hicieron eternas, Oscar consiguió revivirlo. Por ahora parece que funciona pero va lento, cosa a la que no estoy nada acostumbrada.
El hecho es que con toda la novedad del trabajo, del calor que aprieta con fuerza y el resto del día a full con un niño de 3 años que llega de la guardería recién despierto de una siesta y con energía para parar un tren, el día a día ya ha estado bien cargado como para estar sentada frente al ordenador subiendo fotos o escribiendo en mi blog.
El Verano llegó. Y como siempre, llega triunfal. Por la puerta grande.
Creí que este año no iba a pasar tanta calor. ¡Ilusa de mí! y nos encontramos a principios de Julio y mi energía por los suelos.
Pero este año, al contrario de los pasados, he prometido hacer una tregua con esta estación. La suficiente para respetarnos. Y disfrutarnos lo mejor que se pueda la una de la otra.
Como novedad que nos alegra muchísimo está el hecho de que Nico ya perdió el miedo a ir a la playa. Podría decir que más que superar ese miedo, ha superado la sensación de «asco» (que palabra más fea) que le daba la textura de la arena. Y es que, pese a no ser fan de la playa, ver a tu hijo disfrutar hace que empiece a parecerte menos mala y más tu aliada. Creo que podríamos estar en casi cualquier lugar del mundo que no nos guste demasiado solo por el hecho de ver a tu hijo feliz y disfrutando como un enano. Así que el Verano será menos malo cuando tenemos plan asegurado y tan cerca de casa. No hay nada que no arregle un buen chapuzón y unas buenas risas. Y bueno, ese cansancio enorme que te deja la playa aunque hayas estado dos horas. Te asegura una noche de sueño reparador.
Además de esta novedad que tanto nos alegra, he decidido enumerar una lista de todas esas cosas positivas que tiene esta estación y que no ofrecen las demás. Y que pienso disfrutar al 100%.
LISTA DE COSAS QUE ME GUSTAN DEL VERANO
- Las horas extras de luz. ¡Tan necesarias!
- Pasear por la playa. La sensación de la arena húmeda en mis pies me encanta.
- Nunca es tarde para tomar un café. El de las 19 de la tarde me sienta genial. En Verano todo es posible.
- Me encantan las vistas desde mi balcón. En Verano florecen todos los árboles y solo veo verde a mi alrededor. Me da ese aire fresco que necesito en esta época. Me da la vida.
- Los gazpachos y las ensaladas frescas
- Las cenas de bruschettas, provolones, tomates jugosos, mozarella
- Disfrutar de un vino fresquito con amigos
- Chapuzones al atardecer y que te llenan de energía
- Las siestas reparadoras de los fines de semana. Incluido niño. Lo bueno de estar algo choff a causa del calor es que caemos todos y las siestas sientan doblemente mejor.
- Salir a regar las plantas cuando todos duermen y hacer un parón para sentarte y alzar la mirada para ver el cielo estrellado
- Escuchar viejos álbumes las noches de los fines de semana.
- Disfrutar de las fiestas de mi pueblo y encontrarte con todas aquellas personas que durante el resto del año no tienes tanto tiempo de ver.
- Cumplir un año más de vida teniendo salud y una familia sana y que me quiere. Si, Julio es mi mes 🙂
- Lecturas que llegan para salvarte y sanarte. Cada Verano tengo unas cuántas.
- Andar descalza por casa y con ropa holgada y un moño descuidado sin tener que ponerte mil capas.
- El canto de los pájaros al atardecer, del rebaño de ovejas al dormir y de las gallinas al despertar.
- Cada Verano tengo una o dos canciones que hacen que vibre de alegría y me den mucha positividad. Ahora con Spotify mi lista es larga, pero no puedo parar de moverme y sonreír con esta canción de Rihana: Wild Thoughts.
- Batidos fresquitos llenos de cosas ricas que te dejan el cuerpo lleno de energía.
- Helado casero de fresas y plátano.
- Velas al anochecer mientras vemos una peli, en la mesa mientras cenamos.
- Las cenas en el balcón que transcurren lentamente y en los que puedes disfrutar del atardecer en todo su esplendor.
- Escaparte a tus pueblos favoritos de la Tramontana en busca de inspiración y algo de sombra. Siempre llego renovada a casa.
- Ese moreno en tu piel que te hace sentir más guapa, esos collares y pendientes que te pones desde que eres adolescente y te recuerdan que sigues siendo la misma. Con unos años de más, siendo ahora madre. Y que tú puedes con estos Veranos y con todos los que se pongan por delante.
Se nota que mi momento favorito del Verano es al atardecer, no? 🙂
Y vosotros, ¿qué cosas os gustan del Verano? ¿Me ayudas a ampliar mi lista?
Seguro que me dejo un sinfín de cosas (muchas de ellas las iré anotando a medida que me vaya acordando).
Hola Lorena!! Te echábamos de menos! Me han encantado tus reflexiones y el listado de cosas positivas del verano, comparto todas ellas ! También me encantan las sandalias, y llevar las uñas pintadas.
Las faldas y vestidos largos y los tejidos naturales y fresquitos.
Los colores del verano.
Las tormentas de verano, Durán poquito y traen frescor y calma…
El atardecer en la playa, cuando queda poquita gente. Cerrar los ojos y escuchar las olas y sentir el sol que ya no quema en la piel.
Los paseos nocturnos tomando un helado…
Todas las mañanas escucho en el coche la canción que dices de Rihanna cuando voy al trabajo, la ponen en la radio y a mí también me da muy buena energía junto con otras que también me sacan una sonrisa cuando suenan.
Un besito